Adios a las vacaciones y vuelta al trabajo. Quien dijo aquello de "lo bueno si breve dos veces bueno" no pensaba en las vacaciones.
Se acabaron las fiestas, las salidas nocturnas, la playa, el calorcito y empiezan la rutina, el fresquito, los dias nublados y demás mamonadas que no te dejan disfrutar de la vida como debieras.
El madrugar, todo el mundo sabe que castiga mucho el cuerpo, porque te levantas ya con el ceño fruncido, luego arrastras un mal humor que solo desaparece cuando acabas tu jornada y te vas a tomar un solan de cabras con los amigos.
En cambio en vacaciones no madrugas, te levantas a la hora que te pide el cuerpo por lo que siempre estaras a gusto. Comes relajadamente, sin prisas ni agobios. Por la noches sales, a ser posible mucho, ¿por que?, por que por la noche se fomenta la sociabilidad de las personas, se relacionan mucho más. Bebes alcohol (poco o mucho según) que por todos es sabido que es un fabuloso conservante. Al no lucir el sol, la piel no sufre en absoluto ;y sobre todo que por la noche "todos los gatos son pardos" y eso en según que circustancias es maravilloso. (Apreciación esta última que no está basada en hechos reales y va dirigida a las personas solteras, y no a las casadas como yo, besos oliva)
En fin una multitud de cosas positivas que se acaban el mismo día que terminan tus vacaciones
Escuchar el final del verano (duo dinámico)
- 23:00
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